Descripción
#1. ¡¡Bajas en grasa y calorías!!
¿Quieres bajar algo de peso y comer más sano? Atención, 100 gramos de champiñones solo aportan 15 calorías, 100 gramos de níscalos 27 calorías y 100 gramos de setas boletus, 25 calorías. ¿Qué te parece?
#2. Previenen la caída del cabello
Así es. Por si no lo sabías, las setas son una fuente de hierro y de otros minerales como el selenio y el cobre, importantísimos en la formación de queratina y en el suministro de nutrientes vitales a los folículos pilosos. ¡¡Ellos son los que dan fuerza al cabello!!
#3. Regulan el colesterol
¿Sabías que las setas no contienen colesterol? Variedades como las hiitake y la reishi, ayudan al flujo sanguíneo y protegen las paredes de los vasos sanguíneos, por lo que ayudan a mantener un nivel de tensión arterial adecuado.
#4. Te ayudan a combatir contra el cáncer
Algunos fármacos contra el cáncer tienen su origen en hongos, ya que aportan distintos compuestos bioactivos con efectos anticancerígenos.
#5. Ideales para la memoria
¡¡Protege tu capacidad mental!! Los portobello son especialmente ricas en hierro y magnesio.
#6. Perfectas para diabéticos
El champiñón es una hongo recomendada para la diabetes debido a que su aporte de hidratos de carbono es escaso y además contiene vitaminas del grupo B, C y proteínas.
#7. Mejoran la piel
Las setas son ricas en agua, por lo que aseguran una correcta hidratación de la piel. Además, la seta shiitake contiene mucha cantidad de cobre, un oligoelemento esencial para la fabricación de colágeno, que mantiene la tersura de la piel. También contienen gran cantidad de antioxidantes que ayudan a la oxigenación celular.
#8. Alcalinas y desintoxicantes
Las setas ayudan a regular la acidez en el organismo y contienen cantidades de selenio. Este compuesto, desempeña un papel esencial en la función del hígado y actúa como un desintoxicante natural. ¡¡Encuéntralo en setas como el shiitake!!
#9. Antiinflamatorias y cicatrizantes
Algunas setas, como la maitake, tienen propiedades antiinflamatorias que pueden ayudarte en la lucha contra enfermedades como la artritis. Además, también son ricos en vitamina D, un compuesto que favorece la cicatrización de la piel.
